Existen pulseras para todos los gustos, ya sean extravagantes o discretas, minimalistas o de gran tamaño. Desde aquellas con cordones de colores, con perlas, cadenas, colgantes y piedras, hasta los modelos de metales preciosos como la plata o el oro o los brazaletes rígidos. Si no te decides por ninguna, puedes llevar todas las que quieras, mezclando colores y estilos diferentes.