Una bufanda puede añadir una nota de color y distinción a los looks de diario. Hasta el abrigo de invierno más anodino de tu armario se puede revalorizar con una bufanda de lana o una pashmina de cachemir simplemente jugando con colores y estampados. En cambio, para las veladas elegantes o los periodos más cálidos, los fulares de seda o lino son perfectos combinados con una camisa lisa.