El punto intermedio entre camisa y camiseta, el polo nació en los clubes de tenis de la Belle Époque y respeta el carácter de prenda elegante y deportiva al mismo tiempo. A partir del modelo fiel al original, los colores y los estampados son los que marcan la diferencia. El carácter exclusivo del polo se mantiene intacto, ya sea este blanco, negro, de rayas, de manga larga para el invierno o de manga corta para los días de más calor.